Ceremonia de firma en el Monumento Límite nº 1 en El Paso/Juárez. Ingenieros principales John Merino y Luis Antonio Rascón Mendoza. 19 de agosto de 2009
El 19 de agosto de 2009, los Ingenieros Principales representantes de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (IBWC, por sus siglas en inglés) firmaron el " Informe Común de los Ingenieros Principales Referente al Proceso de Cooperación Conjunta México-Estados Unidos para el Programa de Evaluación de Acuíferos Transfronterizos " (Marco Cooperativo). El Marco Cooperativo permitió a científicos y funcionarios gubernamentales de Estados Unidos y México asociarse para evaluar sus acuíferos compartidos, un esfuerzo que se alinea con los principios que promueven la gestión y gobernanza sostenible de las aguas subterráneas.
En nuestras presentaciones y otros materiales sobre el Programa Binacional de Evaluación de Acuíferos Transfronterizos (TAAP, por sus siglas en inglés) aparece regularmente la foto que se muestra aquí de la firma por parte de los Ingenieros Principales de la IBWC Luis Antonio Rascón Mendoza, de la sección mexicana, y John Merino, de la sección estadounidense. Dado que la IBWC implementa soluciones binacionales a los problemas que surgen durante la aplicación de los tratados entre Estados Unidos y México relativos al agua en la región fronteriza, es apropiado que el Marco Cooperativo se firmara en un punto kilométrico a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México. El Marco Cooperativo de tres páginas, mi columna Arizona Water Resource (Verano 2017) explicando sus detalles e importancia y mucha más información de TAAP se pueden encontrar en nuestro sitio web. El Marco Cooperativo es un marco conciso y bien desarrollado para la cooperación binacional.
Me gustaría destacar que el TAAP como programa de colaboración binacional comenzó formalmente en 2009, cuando se firmó el Marco Cooperativo. La legislación de Estados Unidos en 2006 autorizó la participación de colaboradores estadounidenses en un programa de evaluación de acuíferos transfronterizos, que estableció un marco de colaboración en el que participaron el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) y los Institutos de Investigación de Recursos Hídricos autorizados por la Ley de Investigación de Recursos Hídricos de 1964 y sus enmiendas. Sin embargo, la legislación estadounidense, P.L. 109-448, no podía implementar un programa que involucrara a México; la implementación real de un programa binacional requería la cooperación a través de la IBWC. La Ley Pública P. L. 109-448 autorizó fondos para el estudio de acuíferos prioritarios específicos a través de lo que afirmo es una asociación única entre el USGS y los Institutos de Investigación de Recursos Hídricos de la Universidad Estatal de Nuevo México, la Universidad de Texas A&M y la Universidad de Arizona. Los fondos asignados se repartirían en partes iguales entre el USGS y los institutos del agua. Aunque la legislación de 2006 autorizaba un financiamiento de 50 millones de dólares a lo largo de un periodo de 10 años, en los presupuestos de los ejercicios fiscales federales de 2008 a 2010 se asignó al programa un total de 2 millones de dólares. Tras una pausa en la financiación estadounidense, el Congreso ha autorizado 1 millón de dólares anuales para el programa desde el año fiscal federal 2016. El financiamiento mexicano ha dependido igualmente de las decisiones de su gobierno federal y ha variado a lo largo del tiempo.
Al igual que un programa binacional no puede ser establecido por un solo país, especificar los acuíferos binacionales para su estudio requiere un acuerdo. Los cuatro acuíferos, que se muestran en el siguiente mapa, fueron identificados conjuntamente para su estudio. A finales de 2009 se celebró un taller para considerar las prioridades de estudio a lo largo de la frontera binacional compartida por los estados de Arizona, Estados Unidos y Sonora, Mexico. El trabajo centrado en estos dos acuíferos compartidos se ha guiado por el Marco Cooperativo. Con la IBWC en el papel clave de coordinación, el USGS, la CONAGUA (Comisión Nacional del Agua de México), la Universidad de Arizona y la Universidad de Sonora han colaborado para producir el Estudio Binacional del Acuífero Transfronterizo San Pedro de 2016 totalmente bilingüe y el estudio complementario del acuífero transfronterizo Santa Cruz, que aún está en fase de borrador. Algunas de las lecciones aprendidas importantes del estudio binacional de estas dos regiones que dependen de las aguas subterráneas se describen en un artículo de 2018 de Callegary et al. "Hallazgos y lecciones aprendidas de la evaluación de los acuíferos transfronterizos México-Estados Unidos de San Pedro y Santa Cruz: La utilidad de las ciencias sociales en la investigación hidrológica aplicada", Journal of Hydrology: Regional Studies, 60-73. También se ha seguido trabajando en los otros dos acuíferos de interés.
Cuesta creer que hayan pasado 10 años desde que tuve el gran placer de anunciar la aprobación del Marco Cooperativo en la Semana Mundial del Agua de Estocolmo, el 20 de agosto de 2009, ¡el día inmediatamente posterior a su firma! Diez años después, sigo estando orgullosa de participar en este programa binacional único de evaluación de acuíferos. Dado que la dependencia de las aguas subterráneas es más importante que nunca, es esencial una caracterización binacional consensuada de este recurso crítico. Espero con interés la continuación de los esfuerzos del Programa de Evaluación de Acuíferos Transfronterizos.